Estudio Bíblico

La ofrenda por el pecado, el sacrificio que quitaba el pecado, era el sacrificio el día de la Expiación.
• El sacrificio que quitaba, expiaba, el pecado del pueblo.
• Y Jesús es el Cordero (el sacrificio) que quita el pecado del mundo (Mat_1:21, Jua_1:29).
• De tal manera que el sacrificio del día de la Expiación es una sombra de Jesús.

En hebreo, la ofrenda por el pecado se llama "Khataah".
• Jesús, entonces, es el "Khataah".
• Pero la palabra tiene un doble significado.
• Por un lado, significa la ofrenda por el pecado.
• Pero por otro lado significa el pecado.
• Tanto el sacrificio como el pecado llevan el mismo nombre.
• El sacrificio se convierte en eso mismo que quita.
• Así, para que Jesús quitará el pecado, tenía que convertirse Él mismo en pecado (2Co_5:21, Isa_53:6, Isa_53:12).

¿Qué significa todo ello?
• Tanto el sacrificio, como el pecado, llevan el mismo nombre, el "Khataah".
• El sacrificio (Cristo) no solo lleva el nombre del pecado.
• El pecado lleva el nombre del sacrificio que quita el pecado (Jesús).
• Cada pecado lleva el Nombre de Él.
• Cada pecado lleva el nombre del sacrificio.
• Significa que todos nuestros pecados Él ya los llevó, que ya no pertenecen a nosotros (Rom_7:17).
• Mantener lo que ya no nos pertenece es estar en posesión de una propiedad robada.
• Así que entreguémosle a Jesús lo que le pertenece y lo que lleva Su Nombre escrito.
• Démosle nuestros pecados, cada uno de ellos (Mat_11:28-30).
• Soltémoslos, pues ya no nos pertenecen.
• Seguir en propiedad de los pecados, es un pecado.
• Tomemos cada pecado, culpa, vergüenza, fracaso, lamento y error en nuestras vidas, y pongamos el Nombre de Cristo sobre cada uno de ellos.
• Y después, entreguémoselos.

Bibliografía: "El libro de los Misterios", Jonathan Cahn.