Estudio Bíblico

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Creciendo en la vida abundante.



CRECIMIENTO ESPIRITUAL.
(Discipulado).

Efe_2:10, Jer_29:11, Pro_418: Jua_10.10.
• Una vez salvos, Dios tiene un propósito para nuestra vida (que tengamos vida abundante: vida eterna).
• Ese própósito tiene cinco partes:
• Vivir vidas que le agraden a Él (Adoración) (Jua_4:23-24) (1Pe_1:14-16).
• Ser parte activa de Su familia, Su Cuerpo, Su Iglesia (Participación) (Rom_12:5).
• Ser como Cristo y vivir la vida que Él nos enseñó en Su vida terrenal (Carácter) (Rom_8:28-29).
• Servir a Dios, el Padre (Servicio) (Isa_41:9-10).
• Ser parte de Su obra en el mundo (Comisión) (Mar_5:18-20) (Hch_1:8) (Mar_16:15-16) (Mat_28:18-20).
• Y todo ello implica crecimiento, madurez espiritual (1Co_2:6, Heb_5:14).

Entonces, el propósito general de nuestro Padre, es que tengamos vida abundante, plena, próspera, que maduremos espiritualmente (3Jn_1:2).
• La madurez espiritual implica la transformación de nuestro carácter al carácter de Cristo, y como resultado de ello, un creciente manifestación de obediencia a la Palabra y del fruto del Espíritu en nuestra vida cotidiana (Luc_6:46) (Gal_5:22-23).
• Pero muchos cristianos hoy están estáticos, envejeciendo en edad pero no creciendo en carácter.

El crecimiento espiritual no es automático ni un proceso cuya responsabilidad total recaiga en el Señor.
• Es un crecimiento intencional en el que cada uno de nosotros tiene:
• Una función que cumplir.
• Un compromiso que asumir, aunque ahora la palabra "compromiso" no nos atraiga.
• Pero en Dios es una palabra fundamental para alcanzar Sus planes de bien que tiene para nosotros para darnos un futuro y una esperanza (Jer_29:11).

En primer lugar requiere de nosotros el compromiso, el anhelo, el deseo y la decisión de crecer.
• Solo llegaremos a ser lo que estemos comprometidos a ser (ni llamaradas de tusas)(de buenas intenciones está lleno el camino al infierno)(el cambio no es cambio hasta que cambio) (1Co_13:11)(Rom_12:1-2).
• En segundo lugar, del esfuerzo para crecer (Jos_1:7-8)(2Ti_2:1). Es un proceso diario (Flp_1:6).
• Y en tercer lugar, de la persistencia en ese crecimiento (Mat_11:12)(1Ti_4:16)(2Ti_3:14).

Todo lo que elijamos, sea estancarnos o crecer, tendrá consecuencias:
• En la calidad de vida que vivamos en la tierra.
• También en la eternidad (Gal_6:7)(1Co_3:11-15).
• Y no solo nos va a afectar a cada uno de nosotros sino también va a influír en nuestra familia (Isa_59:21).

Por ello necesitamos tomar nuestro crecimiento espiritual en serio.

El crecimiento espiritual tiene dos elementos (Fil_2:12-13).
• La nuestra: ocuparnos en nuestra salvación con temor y temblor.
• La parte de Dios producir el querer y el hacer.
• La parte de Dios en nuestro crecimiento es la transformación de nuestro corazón en el momento que Él lo considere oportuno, para nuestro beneficio (Ecl_3:1, Ecl_3:11, 2Co_3:18, Fil_1:6).

Un aspecto fundamental en nuestro crecimiento espiritual es el cambio de nuestra manera de pensar.
• Somos lo que son nuestros pensamientos (Pro_23:7).
• Nuestros pensamientos más profundos se convierten en acciones.
• Por ello Dios nos enseña en Su Palabra que guardemos el lugar donde se establecen los pensamientos más profundos, esenciales, vitales, que es nuestro corazón (intenciones, motivaciones, actitudes, decisiones, comportamientos) (Pro_4:23, 3Jn_1:2).
• La vida pecaminosa que nos llevó a la desesperación y a la necesidad de entregarle nuestras vidas a Cristo fué el resultado de vivir de acuerdo a la mente carnal.
• Para vivir la vida abundante, en primer lugar, necesitamos cambiar lo que está en nuestra alma por lo que dice la Palabra de Dios (Rom_12:2).
• Eso implica, entonces que nuestra primera tarea tendiente al crecimiento para alcanzar la vida abundante es el conocimiento cada día más profundo de la Palabra de Dios (Rom_12:2) y pensar en ella contínuamente (Flp_4:8)(Sal_1:1-3).
• La Palabra de Dios no solo nos enseña e instruye, también nos confronta y nos redarguye con respecto a la vieja manera de vivir, de las cosas profundas que aún quedan en nosotros de esa manera de vivir.
• Por ello, para entrar en el Reino de Dios (vivir la plenitud de la vida abundante) necesitamos el arrepentimiento:
• En general de la vieja manera de vivir (no añorarla, no desearla, no buscarla, no apreciarla).
• En particular de cada cosa que el Espíritu nos va revelando de la vida en la carne.
• Arrepentimiento:
• Un giro de 180 grados, en la dirección contraria a donde íbamos cuando viviámos nuestra vida sin Cristo (Luc:15:17.21).
• Cambio de pensamiento.
• Cambio de sentimientos y emociones.
• Cambio de actitudes y motivaciones.
• Cambio de decisiones y planes.
• Es un volver en sí de todo lo que nos llevaba a la muerte (el pecado) para seguir lo que ahora nos lleva a la vida (la obediencia, Rom_6:23).
• Los caminos del ego, del yo, que nos parecen derechos en nuestra propia opinión pero su fin es camino de muerte (Pro_14:12).
• Si no hacemos lo que Dios nos dice que es necesario para tener vida en abundancia, no esperemos tenerla.
• Dios no puede ser burlado o engañado, todo lo que sembramos eso también cosecharemos (Rom_8:5-8, Gal_6:7-8).



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Tema para reflexionar. La vida abundante dependerá de nuestro crecimiento espiritual, y el crecimiento espíritul depende de que nuestros pensamientos y todo lo que implica nuestro carácter (pensamientos, sentimientos, emociones, motivaciones, actitudes, decisiones, acciones) estén alineados a los de Dios.

Versículo para memorizar. Rom_12:2.

Pregunta para meditar ¿Que decisiones necesitamos tomar en nuestras vidas para incrementar nuestro crecimiento espiritual?

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06 Jun 2023