Estudio Bíblico

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Gal 2:6-14. El compañerismo cristiano



Gal_2:6 (a). Lo que hayamos sido en otro tiempo no le debe importar a nadie.
• Cristo ya lo perdonó, ya lo ocultó en el fondo del mar (Miq_7:19) y nunca más se acordará de eso (Heb_8:12).
• Nuevas son sus misericordias para con nosotros cada mañana (Lam_3:22-23).
• Las cosas viejas pasaron, todos son hechas nuevas (2Co_5:17).
• Si Dios ya no se acuerda porque nosotros seguimos recordando nuestro pasado y el de otros (acusación, juicio, culpa, condenación): esclavitud al pasado.


Gal_2:6 (b). Dios no hace acepción de personas.
• Delante de Dios todos valemos lo mismo.
• Aunque tenemos diferentes responsabilidades.
○ Cada uno va a ser juzgado por lo que recibió de parte de Dios, no por lo que no recibió (Mat_25:15).
• Dios es equitativo (equidad), no igualitario (igualdad).
• Y nos manda a nosotros a serlo igualmente.
○ Sal_67:4, Pro_1:3, Pro_2:9.


Gal_2:7-8.
• Todos somos llamados a un llamamiento general (salvación, vida eterna, obediencia, fructificación, servicio, anunciar al Padre y a Cristo) pero cada uno tenemos un lugar específico, un llamado específico de como, cuando, con quién, para quién, etc., hacerlo.
• No solo necesitamos el llamado, necesitamos las instrucciones del llamado (Pro_29:18, Hab_2:2-3, Isa_54:2-3).


Gal_2:9.
• No todos vamos a ejercer el llamado de Dios de la misma manera.
• La forma de ejercer el llamado depende de muchas cosas:
○ Las circunstancias específicas en las que lo desarrollamos.
○ Las personas específicas a las que vamos a alcanzar.
○ El nivel de conocimiento y revelación que tengamos de la Palabra.
○ De quién hayamos aprendido.
• Necesitamos reconocer la gracia que les ha sido dado a los hermanos (esencia igual, formas diferentes).
• Y relacionarnos con ellos con compañerismo, no como enemigos (Jn 17).


Gal_2:10.
• Así como no nos debemos olvidar del Señor y del Evangelio, no debemos olvidarnos de los que tienen necesidad (Mat_25:35-40).

Gal 2:11-14. Parte del compañerismo cristiano es la corrección.
• El legalismo como el querer agradar a los hombres en lugar de a Dios es algo que está arraigado en esa parte engañosa y perversa de nuestro propio corazón (Jer_17:9).
○ Siempre necesitamos estar atentos a evitar que esas dos cosas salgan a flote en nuestra manera de vivir, si todavía no están totalmente desarraigadas de nuestro corazón.
• El hecho que seamos ministros del Señor, no importa el tiempo ni el conocimiento ni la experiencia que tengamos, no implica que seamos perfectos, y podemos fallar y pecar.
○ Eso no nos hace menos delante del Señor.
○ Necesitamos reconocerlo, arrepentirnos, confesarlo y pedir perdón delante del Señor, y recibir Su perdón.
• Cuando el pecado es en público, necesita ser confrontado y corregido en público.
○ Cuando somos ejemplo para otros, y otros nos han seguido en el pecado o el error, para corregir a todos de una sola vez, necesitamos hacer la corrección en público.
○ Además ello previene a otros de incurrir en pecados de ese tipo.
○ No es falta de amor, al contrario, es por amor que corregimos.
○ Dejar pasar el pecado implica que las personas lo van a seguir cometiendo.
• Cuando el pecado es en privado, no debe ser corregido en público, sino en privado.
• El legalismo:
§ No solo es un asesino de la gracia (de la libertad responsable que tenemos en Cristo Jesús).
§ Es también hipocresía y simulación, porque es actuar externamente de una manera diferente a lo que hay en el corazón.
§ Además es buscar agradar a los hombres antes que a Dios.
§ Y finalmente, arrastra a otros al mismo pecado.

13 Mayo 2022