Lecciones de una situación desesperada.
1 Sam 30:4.
Es "normal" que en medio de situaciones sumamente complicadas nos aflijamos. Pero la aflicción debe dar lugar a la confianza en Dios
(Jn 16:33) (Rom 8:28-29) (Rom 8:37) (Rom 8:39)
No son para destruírnos ni derrotarnos.
Cristo vino a la tierra para deshacer las obras del diablo (1 Jn 3:8).
1 Sam 30:6.
1) Se dejó calmar por Dios.
2) Oro y buscó la dirección de Dios.
3) Obedeció, ejecutó la voluntad de Dios (fe y confiar).
Ante las tormentas de la vida se fortaleció en el Señor (Efe_6:10-13) para poder tomar decisiones sabias.
1 Sam 30:8.
No se dejó guiar por el sentido común ni por sus emociones; aún cuando lo obvio era ir en busca de sus enemigos, primero buscó la dirección de Dios.
1 Sam 30:9-10.
Cuando somos dirigidos por Dios y haciendo Su Voluntad, las cantidades no son importantes. Él es más que suficiente.
El hace mucho con poco.
Abraham cuando rescató a Lot (318 contra el ejército de 5 reyes).
Gedeón con trescientos venció al ejército de los madianitas con 300 hombres.
Uno solo de nosotros, con el Padre Todopoderoso que nos respalde, somos mayoría.
Cuando algunos se van cansando y quedando en el camino, no hay que desecharlos, hay que reasignarlos a otras tareas para que no dejen de servir y recuperen fuerzas.
1 Sam 30:11-16.
Dios provee los recursos que necesitamos para hacer Su Voluntad (pro-visión).
El egipcio de junto al camino que los guió al ejército de los enemigos.
Alinear a las circunstancias para que se cumpla Su Voluntad.
1 Sam 30:18-19.
Nuestro Padre es un Dios de restauración y de restitución cuando caminamos conforme a Su Voluntad, en Sus caminos (Joe_2:25).
1 Sam 30:20.
Dios nos restaura y restituye más aún de lo que hayamos perdido. Nos da mucho más abundantemente de lo que hemos pedido y/o entendemos (Efe_3:20-21).
1 Sam 30:22.
Dios moviliza a favor de nosotros aún a los malos y perversos (codicia, egoísmo, injusticia, inequidad).
Dios no es un Dios igualitarista, es un Dios equitativo (a cada uno según su capacidad, Mat_25:15).
Cuando andamos con gente de pensamiento equivocado, no nos debemos dejar influír por su pensamiento.
Tampoco los deberíamos desechar: hay que enseñarles lo correcto, lo justo.
1 Sam 30:23-25.
Dar de gracia lo que de gracia hemos recibido (Mat 10:8).
1 Sam 30:26-30.
Con el misericordioso nos debemos mostrar misericordiosos (2Sa_22:26, Sal_18:25).
David no se olvidó de los que en el pasado lo habían ayudado: se mostró agradecido y generoso con ellos.
Cuando Dios nos da es para que demos.
Y cuando damos es porque Dios nos va a dar más para que demos aún más.
2Co_9:6-11.
Recibimos conforme a lo que damos.
Dios quiere que seamos generosos (dadores alegres).
¿Por qué y para qué? (6 todos):
Para que abunde en nosotros toda gracia.
Para que tenganos siempre en todas las cosas.
Todo lo suficiente.
Para toda buena obra.
Para que estemos enriquecidos en todo.
Para toda liberalidad.
Lecciones de este pasaje:
Por lo general, en todo proceso que Dios vaya a obra a nuestro favor y/o a favor de otros, Dios no lo va a hacer solo, nos va a llamar a nosotros para que trabajemos con Él (somos sus colaboradores activos y no observadores pasivos, la mayor parte de las veces, 1Co_3:9, 2Co_6:1).
La liberación del pueblo de Israel de Egipto (Exo_3:7-11).
Dios cambia tiempos y da nuevas oportunidades.
Nuestro Padre es un Padre de restitución y restauración, y cuando lo hace, lo hace más abundantemente de lo que pedimos y/o esperamos porque El lleva nuestra vida en aumento (Pro_4:18).
Para ello necesitamos no depender de nosotros mismos ni de los recursos que tenemos a nuestro alrededor, sino de Dios y Su Voluntad (Jer_17:5-8).
Él lo hará todo en Su tiempo (Ecl_3:11).
Lo que nosotros necesitamos en poner toda nuestra confianza en Él (Sal_37:3-5).
Cuando caminamos en Su Voluntad, el Señor hará varias cosas:
Mucho con poco.
Alineará todas las situaciones y recursos a nuestro favor para que su Voluntad se cumpla.
Si somos personas que tenemos con nosotros un equipo de trabajo, en ellos vamos a encontrar:
Personas que no caminen a nuestra velocidad (no desecharlas, reasignarlas).
Personas que no piensen como nosotros y que estén equivocadas (no desecharlas, corregirlas y enseñarlas).
Cuando alcancemos nuestras metas en Cristo, no nos olvidemos a todos aquellos que en nuestro pasado nos ayudaron de alguna forma:
Nuestros triunfos actuales dependen de aquellos que nos apoyaron en el pasado.
Todos somos una construcción de nuestro Dios y social (los que Dios puso a nuestro alrededor para apoyarnos --con lo bueno y con lo malo, en las buenas y en las malas--).
No nos olvidemos de todos aquellos que de alguna manera contribuyeron a nuestra formación y/o preparación para este tiempo:
Corazón agradecido y generoso.
Es "normal" que en medio de situaciones sumamente complicadas nos aflijamos. Pero la aflicción debe dar lugar a la confianza en Dios
(Jn 16:33) (Rom 8:28-29) (Rom 8:37) (Rom 8:39)
No son para destruírnos ni derrotarnos.
Cristo vino a la tierra para deshacer las obras del diablo (1 Jn 3:8).
1 Sam 30:6.
1) Se dejó calmar por Dios.
2) Oro y buscó la dirección de Dios.
3) Obedeció, ejecutó la voluntad de Dios (fe y confiar).
Ante las tormentas de la vida se fortaleció en el Señor (Efe_6:10-13) para poder tomar decisiones sabias.
1 Sam 30:8.
No se dejó guiar por el sentido común ni por sus emociones; aún cuando lo obvio era ir en busca de sus enemigos, primero buscó la dirección de Dios.
1 Sam 30:9-10.
Cuando somos dirigidos por Dios y haciendo Su Voluntad, las cantidades no son importantes. Él es más que suficiente.
El hace mucho con poco.
Abraham cuando rescató a Lot (318 contra el ejército de 5 reyes).
Gedeón con trescientos venció al ejército de los madianitas con 300 hombres.
Uno solo de nosotros, con el Padre Todopoderoso que nos respalde, somos mayoría.
Cuando algunos se van cansando y quedando en el camino, no hay que desecharlos, hay que reasignarlos a otras tareas para que no dejen de servir y recuperen fuerzas.
1 Sam 30:11-16.
Dios provee los recursos que necesitamos para hacer Su Voluntad (pro-visión).
El egipcio de junto al camino que los guió al ejército de los enemigos.
Alinear a las circunstancias para que se cumpla Su Voluntad.
1 Sam 30:18-19.
Nuestro Padre es un Dios de restauración y de restitución cuando caminamos conforme a Su Voluntad, en Sus caminos (Joe_2:25).
1 Sam 30:20.
Dios nos restaura y restituye más aún de lo que hayamos perdido. Nos da mucho más abundantemente de lo que hemos pedido y/o entendemos (Efe_3:20-21).
1 Sam 30:22.
Dios moviliza a favor de nosotros aún a los malos y perversos (codicia, egoísmo, injusticia, inequidad).
Dios no es un Dios igualitarista, es un Dios equitativo (a cada uno según su capacidad, Mat_25:15).
Cuando andamos con gente de pensamiento equivocado, no nos debemos dejar influír por su pensamiento.
Tampoco los deberíamos desechar: hay que enseñarles lo correcto, lo justo.
1 Sam 30:23-25.
Dar de gracia lo que de gracia hemos recibido (Mat 10:8).
1 Sam 30:26-30.
Con el misericordioso nos debemos mostrar misericordiosos (2Sa_22:26, Sal_18:25).
David no se olvidó de los que en el pasado lo habían ayudado: se mostró agradecido y generoso con ellos.
Cuando Dios nos da es para que demos.
Y cuando damos es porque Dios nos va a dar más para que demos aún más.
2Co_9:6-11.
Recibimos conforme a lo que damos.
Dios quiere que seamos generosos (dadores alegres).
¿Por qué y para qué? (6 todos):
Para que abunde en nosotros toda gracia.
Para que tenganos siempre en todas las cosas.
Todo lo suficiente.
Para toda buena obra.
Para que estemos enriquecidos en todo.
Para toda liberalidad.
Lecciones de este pasaje:
Por lo general, en todo proceso que Dios vaya a obra a nuestro favor y/o a favor de otros, Dios no lo va a hacer solo, nos va a llamar a nosotros para que trabajemos con Él (somos sus colaboradores activos y no observadores pasivos, la mayor parte de las veces, 1Co_3:9, 2Co_6:1).
La liberación del pueblo de Israel de Egipto (Exo_3:7-11).
Dios cambia tiempos y da nuevas oportunidades.
Nuestro Padre es un Padre de restitución y restauración, y cuando lo hace, lo hace más abundantemente de lo que pedimos y/o esperamos porque El lleva nuestra vida en aumento (Pro_4:18).
Para ello necesitamos no depender de nosotros mismos ni de los recursos que tenemos a nuestro alrededor, sino de Dios y Su Voluntad (Jer_17:5-8).
Él lo hará todo en Su tiempo (Ecl_3:11).
Lo que nosotros necesitamos en poner toda nuestra confianza en Él (Sal_37:3-5).
Cuando caminamos en Su Voluntad, el Señor hará varias cosas:
Mucho con poco.
Alineará todas las situaciones y recursos a nuestro favor para que su Voluntad se cumpla.
Si somos personas que tenemos con nosotros un equipo de trabajo, en ellos vamos a encontrar:
Personas que no caminen a nuestra velocidad (no desecharlas, reasignarlas).
Personas que no piensen como nosotros y que estén equivocadas (no desecharlas, corregirlas y enseñarlas).
Cuando alcancemos nuestras metas en Cristo, no nos olvidemos a todos aquellos que en nuestro pasado nos ayudaron de alguna forma:
Nuestros triunfos actuales dependen de aquellos que nos apoyaron en el pasado.
Todos somos una construcción de nuestro Dios y social (los que Dios puso a nuestro alrededor para apoyarnos --con lo bueno y con lo malo, en las buenas y en las malas--).
No nos olvidemos de todos aquellos que de alguna manera contribuyeron a nuestra formación y/o preparación para este tiempo:
Corazón agradecido y generoso.
17
Mar
2022