Estudio Bíblico

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Módulo 215. El libro de Nehemías y la visión.




NEH 2.1. Las visiones de Dios no siempre exigen una actuación inmediata.

Cuando Nehemías comenzó a orar era el mes de Quisleu (noviembre-diciembre, Neh 1:1) y la primera acción derivada de ello en la dirección de la solución del problema sucedió en el mes de Nisán (marzo-abril), es decir, entre 3 y 4 meses despues.
• El primer paso en relación a la visión, después de recibir el impacto de la necesidad y la idea de lo que podría y debería ser, no es ponernos a activar como locos debido a la urgencia de la solución; es ir a la fuente de toda visión genuina: Dios mismo.
• Hay que buscar a Dios para saber que esa idea viene de El, esperar que Dios la confirme en nuestros corazones, la afirme y nos dé más detalles, o la deseche (cuando solo es una buena idea para mi pero no una visión para que yo corra con ella).
• Una visión clara no siempre indica que tengamos la luz verde para comenzar.
• Lanzarse a la acción demasiado temprano puede tener como resultado el fracaso, el desánimo y la desilusión.

Hay tres cosas importantes que suceden mientras esperamos:
• La visión madura en nosotros.
• Maduramos como preparación para la visión.
• Dios trabajo detrás del escenario, preparando el camino.

La visión madura en nosotros.
• De la misma forma que no podemos apresurar el desarrollo de un niño en el seno materno, tampoco podemos apresurar el desarrollo de una visión.
• Es Dios quien establece el momento de su nacimiento.
• Actuar con demasiada rapidez es como dar a luz a un niño prematuro.
• Las visiones inmaduras son débiles y como el mundo se comporta con dureza ante las visiones porque significan cambios y el cambio no tiene la bienvenida en la mayoría de los escenarios de la vida, para que una visión sobreviva, debe estar madura y saludable antes de entrar en contacto con el ambiente cínico, crítico y obstinado en el cual se espera que sobreviva.

Maduramos como preparación para la visión.
• Dios necesita hacernos crecer al tamaño de Su visión.
• Es como la niña que se prueba el vestido de bodas de la madre, y no le sirve aún. Pero con el tiempo, después de que crezca lo necesario, va a dar la impresión de que fue hecho para ella.
• La acción antes de la preparación suele terminar en desastre.
• El se pone a obrar en nosotros a fin de prepararnos para lo que sabe que viene por delante.
• Nuestra visión no es más que una extensión de la visión de Él, y su horario es perfecto.
• Su visión nos va a capacitar para que soportemos la preparación.
• La visión siempre precede a la preparación.

Dios trabaja tras el escenario, preparando el camino.
• Su visión que nos entrega en lo personal solo es una pequeña pieza del rompecabezas divino.
• La visión de Dios para nuestra vida es mucho mayor que nosotros y sin Su intervención y preparación del escenario para su cumplimiento, no vamos a ser capaces de realizar ni siquiera la pequeña parte que nos toca en la operación.

¿Cómo saber si nuestra visión es auténtica?.
• Vamos a tener una convicción inquebrantable en nuestro corazón por el Espíritu (Heb 11:1, Rom 8.14, 2 Cor 5:14).
• Terminamos considerando como un imperativo moral el realizarla (2 Cor 5:14, Rom 1:14-15, Fil 3:14).
• Va a estar en sintonía con lo que Dios está haciendo en el mundo (Ecle 3.1-11, 1 Cro 12:32).


NEH 2:12. Visión e investigación.

Por lo general, cuando compartimos una visión de forma prematura, tendremos garantizada una recepción poco cálida.
Además de esto, suele haber por lo menos algún trabajo previo que es necesario hacer antes de publicar la idea, tal como: buscar datos, explorar, preparar el terreno antes de comenzar a decirle a la gente lo que piensa hacer, etc.
Antes de compartir la visión es sabio conocer con qué nos vamos a encontrar (Luc 14:28). Necesitamos saber todo lo que podamos saber antes de abrir nuestra visión para que nos hagan preguntas.
Todo el trabajo previo de investigación que hagamos, producirá por lo menos una de estas tres cosas:
• Nos confirma el origen divino de nuestra visión. La investigación que hicieron de Cannaán los espías de Josué los llevó a la confirmación de que había llegado el momento oportuno y estaban en el lugar debido para lanzar su misión. Antes de lanzarse, investigaron, confirmaron la visión y el momento.
• Le da mayor definición y enfoque. Es probable que el plan original de Nehemías comprendiera la restauración de los muros que rodeaban a Jerusalén a sus medidas y extensión originales. Sin embargo, después de analizar las ruinas, revisó su plan, hizo más estrecho su enfoque, y como consecuencia, el muro construido bajo su dirección tuvo unas dimensiones menores que el anterior.
• Nos indica que estábamos equivocados por completo con respecto a la visión. Es posible que la investigación nos lleve a la conclusión de que nuestra visión no era en realidad tal visión sino solo se trataba de una buena idea. Lo que a nosotros nos parece una visión puede ser en realidad una visión de otra persona.
La investigación no es importante solo por nuestro bien.
• También es importante por el bien de los que trabajan junto a nosotros.
• Vamos a necesitar apoyo. Y los miembros de nuestro equipo necesitan saber las cosas a las que se van a enfrentar, y nosotros necesitamos saber a que los estamos llevando.
Investigación y desaliento.
• No permitamos que el desaliento de una cuantas puertas cerradas de golpe en nuestra cara haga que nos alejemos de la visión que Dios ha hecho nacer en nuestro corazón.
• Investiguemos más, miremos a nuestro alrededor, pensemos fuera de lo establecido.
• Son pocos los lugares de destino que tienen solo un punto de acceso. Lo mismo sucede con la visión.
• Si esta bloqueado nuestro enfoque inicial, busquemos alternativas, no nos demos por vencidos enseguida.
• A lo mejor solo nos hallamos a una pregunta de distancia de la llave que va a abrir la puesta que se alza entre nosotros y la visión de Dios para nuestra vida.
• Dios va a usar este período de investigación para confirmar, aclarar, y algunas veces, reorientar nuestra visión.


04 Jul 2012